Encuentra ese tipo de gente

Encuentra a gente que se sienta afortunada de tenerte;

feliz; gente que te quiera.

Y sí, hablo de amor.

Pero no de ese amor pasteloso de las películas americanas.

Amor del de verdad, del duradero.

Encuentra a gente que cuente contigo sin pedírselo,

porque sí, porque quieren hacerlo.

Ese tipo de personas fabulosas que aparecen en tu vida para hacerte el día día más fácil, más feliz.

Esas personas de las que empiezas la frase "te acuerdas cuando"...

Y no hace falta terminarla porque te interrumpen con una carcajada.

Encuentra ese tipo de gente mágica con capacidad de hacer

que tú sonrisa se multiplique por diez al ver sus caras.

De las que te aprietan la mano durante esa canción y 

siempre saben que estrofa cantar a todo pulmón.

Encuentra esa gente que no necesita decirte nada cuando lloras,

que te abraza y sin saber como, te quita el frío.

Gente que se acuerda de ti con una frase o palabra.

Gente que te conozca lo suficiente como para

recomendarte un libro, una película, un grupo o una serie...

Encuentra esa gente que se sienta feliz de tenerte,

que te haga mejor persona.

que se quede para un último cigarro o una última canción.

Encuentralos y cuídalos. 

Todo lo que das en esta vida te lo devuelve.

Mi felicidad

Mi felicidad solo depende

de una persona.

Y esa persona,

soy yo.

Soy una cobarde.

Por cada lágrima, una sonrisa. Por cada duda, un abrazo. Todos los "te quiero" de vuelta. Pedir perdón cuando se haya hecho algo mal. Y yo no te pido nada más. Y, sin embargo, te lo daré todo. Comprenderé que no me quieras, que me odies, que sea una pesada, que quieras estar solo. Pero yo seguiré allí, en mi esquina, preocupándome por ti, por si he hecho algo mal, por si te hice daño cuando nunca fue esa mi intención. Digo cosas que nunca serán verdad para evitar que luego todo sea peor. 

Tan estúpida que si tu me miras yo te aparto la mirada

Soy tan imperfecta que lloro viendo una película cualquiera, que cuando canto algo en ingles, hago que parezca otro idioma. Tan torpe que me caigo en el sitio mas tonto, que se me olvida el paraguas justo el día que llueve, incluso tanto que cuando llevo dinero encima voy y lo pierdo. Tan inmadura que en el momento menos oportuno me da el ataque de risa. Tan tonta que me enfado cuando no tengo motivo, que grito tanto que me quedo sin voz, que cuando quiero a alguien por mi orgullo me alejo. Tan estúpida que si tu me miras yo te aparto la mirada, que cuando algo va mal, yo voy y lo empeoro, que sin quererlo me meto en conversaciones ajenas. Tan absurda que nunca encuentro las llaves porque las he dejado en el bolso del día anterior, que cuando mas sueño tengo me paso la noche sin poder dormir. Pero ¿sabes que? que me gusta ser asi. Y esos solo son algunos de mis defectos, y aunque nunca los admito, se que los tengo, e intento mejorarlos, mientras que otras solo ignoran y niegan los suyos para parecer perfectas, cuando en realidad no lo son.

Nunca debemos rendirnos.

Algo tan simple como un juego de azar puede representar nuestra vida. Una serie de casualidades, de movimientos, puede hacer que lleguemos lejos o que tropecemos siempre con el mismo obstáculo y no avancemos. Siempre habrán personas que querrán impedirnos que lleguemos al final, que consigamos obtener nuestros objetivos, pero nunca, nunca tenemos que rendirnos debemos acabar la partida, mejor dicho, tenemos que ganar.

Es nuestro estilo de vida.

Se feliz, disfruta, ríe, juega, se mala y siéntete bien al serlo. Demuestra que la locura es algo maravilloso. Piensa que puedes hacer lo que quieras, nada está prohibido, y si lo está, muchísimo mejor. Siéntete libre y di lo que pienses por mucho daño que haga no te lo calles. Ve a las fiestas y súbete encima de una mesa para ser tan solamente feliz. Grita, salta, baila, canta…
Cree que eres especial, que nada ni nadie puede llegar a dañarte.
No me digas que todo esto es mentira, lo sé, pero aún así, cree en ello durante un instante, ya que eso es la felicidad. Porque por mucho que diga la gente, la felicidad no es una meta. Es un estilo de vida.

ser y que sean felices todos los de tu alrededor.

Me encanta que me susurren al oído, que cada beso vaya seguido con un te quiero, que cada minuto de mi vida sea una anécdota para contar, que me digan la verdad, me encanta el olor a humedad en verano, y en otoño el olor a hojas mojadas, ver las gotas de agua resbalar por el cristal pensando cual llegará antes, fingir fumar con el vaho cuando hace frío, escribir su nombre en el cristal empañado al salir de la ducha, que me duelan las mejillas de tanto sonreír, ir al cine y empezar a lanzar palomitas como si de la tercera guerra mundial se tratara, me encanta besar debajo de la lluvia,  comer nocilla con el dedo e intentar hacer equilibrio en el borde de la acera, pasar un semáforo solo pisando lo blanco, el olor a libro nuevo en septiembre, encontrar huecos fríos en las sábanas de mi cama, el ruido de las hojas secas al ser pisadas, mirar por la ventana y quedarte embobada, sonreír a extraños y que te devuelvan la sonrisa, ser y que sean felices todos los de tu alrededor.

No es oro todo lo que reluce

Con el paso del tiempo te das cuenta que no todas las sonrisas son de verdad, ni todos los te quieros son sinceros. Que lo que duele no son las mentiras que se dicen, si no las verdades que se callan. Que lo que más duele no es el golpe si no quien te lo da. Que grandes amigos pueden volverse grandes desconocidos. Que aquellos que te querían ahora te pueden estar odiando. Que la vida es negra o blanca, nunca de color rosa. Que aprendemos que los cuentos no tienen siempre un final feliz, que un final feliz es una historia sin acabar. Aprendemos que los mejores momentos se componen de pequeñas cosas. Que no es oro todo lo que reluce y que quien avisa no es traidor. Que es mejor tener cinco amigos de verdad, que cincuenta falsos. Que el amor puede ser muy bonito pero a la vez muy traicionero. Que quien poco te demuestra, poco le importas. Te darás cuentas que la vida es muy corta, y que el tiempo corre muy deprisa.

Sí te importaba es que ya lo has perdido.

Ni calma ni pollas, ni miedo, ni lágrimas; que el llorar sirve de poco, y el gritar para quedarte afónica. El reír para arrugarte, y el soñar para flipar. El comer para engordar y el beber para mear. Las fotos están para borrarlas, y los recuerdos para hacer daño. Las canciones para cantar y el cantar para que llueva. La lluvia para encerrarte y para encerrarte mucha paciencia. La paciencia para el estudio y el estudio para llegar a lo más alto, ¿y de allí? a lo más bajo. Nunca y te digo ya que nunca tendrás lo que quieres. Porque si lo quieres es porque no lo tienes, y si no lo tienes es porqué ya lo has tenido. Porque si lo has tenido te importaba y si te importaba es que ya lo has perdido.

No podrás olvidarme.

Y justo cuando estés a punto de olvidarme,

alguien pasará por tu lado 

con mi perfume

aparece alguien que te da mil vueltas

De pronto llega alguien que te da mil vueltas,

y te das cuenta de que llevas siendo 

un pringadillo toda tu vida.

Siempre fuerte

No paro de repetirme una y otra vez;

"Mantente siempre fuerte, muchas

personas matarían por verte fallar"

Tú no estás aquí

Hoy la ciudad se cae a trozos, te sigo esperando.

No estás, tú no estas aquí, y yo sigo aquí sentada esperándote.

Esa es mi enfermedad.

Esa esperanza que me mata cada segundo que pasa.

Todo lo que empieza, acaba.

Hay un momento  en el que hay que poner fin.

acabar el capítulo o cerrar el libro y empezar de nuevo.

Ningún comienzo es fácil, siempre es complicado dejarlo todo y empezar de cero.

A veces, nos viene bien cambiar de aires,

cambiar y alejarnos de la monotonía o incluso de él.

Él, al que tanto queremos se ha vuelto como una droga, adictivo.

El problema es que esa droga se ha vuelto dañina.

Y es ahí cuando llega el momento de abrir los ojos,

quitar la ceguera, seguir adelante sin él.

Recordar que antes de que él apareciera, había vida,

y que a pesar de todo,

antes de conocerlo era feliz.

El camino se va cerrando llegando al final

Y en los momentos justos,

te acabas dando cuenta de que lo mejor ya lo tienes.

Qué al final del camino se va cerrando,

no hay atajos, ya lo has encontrado, y no habrá vuelta atrás.

Lo has sabido tarde.

¿Y cómo estás? En un camino sin ti, ni salida.

Perdido y preocupado.

-¿La dejaste escapar?

+Sí, y ya no volverá.

Ese sentimiento de dolor.

Ese sentimiento que me invade el cuerpo y recorre la sangre,

que llega al corazón y duele.

Sentimiento de dolor, que me crea un vacío, 

y sentirme como una mierda, 

que hace que los ojos se me inunden de agua,

cada lágrima que recorre mi cara es puro dolor.

Que me hace darme cuenta que vivo sin ninguna razón.

Me levanto por las mañanas por obligación,

y me acuesto por las noches porque no tengo otra cosa que hacer.

Ese sentimiento que estoy cansada de sentir,

de llevar dentro de mi, 

y todo este sufrimiento es por ti.

Porque te has ido dejándome como una mierda,

abandonándome sin ninguna explicación.

Este asqueroso sufrimiento, que hace que me levante

todas las mañanas con los ojos hinchados y llenos de lágrimas.

Un sentimiento que te rompe en mil pedazos,

que te hace ver todos y cada uno de los recuerdos

a cámara lenta. 

Recordando esas risas tontas, esas caricias y esos besos.

Todas las noches me acuesto pensado

cual fue el fallo para que te fueras así, de la noche a la mañana.

Ese sentimiento que me quita el hambre, 

que hace que esté todo el día con un nudo en el estómago y garganta.

Un sentimiento doloroso, asqueroso y mortal.

El sentimiento que tu me has dejado sentir.

Pese a todo, te sigo queriendo.

Sólo me quedan los recuerdos.

Bonitos momentos en los que en tus brazos me perdía,

y mi boca buscaba la tuya.

No hacían falta palabras, con una mirada nos los decíamos todo.

Las horas se volvían segundos, y lo que había a nuestro alrededor no importaba.

Todo se fue a la mierda por mentiras, engaños...

Pero, ¿te importa?

Parece que todo lo que vivimos fue algo que nunca existió.

Me miras como si no me conocieras de nada.

Parece que has olvidado por las noches en tu cama como 

tus labios recorrían todo mi cuerpo.

¿Tan fácil olvidaste lo que un día viviste mientras me decías 

"te quiero" ?

¿Cómo me puedes mirar con ese odio después de todo lo que vivimos?

Pese a todo, te sigo queriendo.

Ya me di cuenta que entregar tu corazón a una persona es como

entregar un arma a un asesino;

Te mata o tu corazón muere en silencio.

El centro de mi universo

Que a tu lado no hay cielo que valga.

Que  no conozco a otro infierno que tu ausencia.

No hacen falta amaneceres teniendo tu risa,

ni más lunas que esas ganas de comerte a todas horas.

Te he visto competir con las estrellas.

Hasta el infinito te tiene envidia por ser el centro de mi universo;

Creo que no hace falta que te diga que alimento mi cerebro

a todas horas contigo.

Me apostaría un beso, a que sí es tuyo,

voy a querer otro.

se trata de reír sin darte cuenta

No se trata de ir por la vida con una sonrisa de oreja a oreja

para demostrar que eres feliz.

Se trata de reír sin darte cuenta.

De soñar despierta y no acordarte después.

De jugar con fuego, de quemarte...

Y aún así reír, porque es lo único que puedes hacer,

esa sonrisa que se convierte en carcajada

en menos de un segundo.

Y más tarde llegará a formar parte de esos

momentos irrepetibles.

que componen tu felicidad.

en los peores momentos

Las grandes lecciones,

son las que llegan

en los 

peores momentos.

No depender de nadie.

El éxito consiste en confiar en ti.

No depender de nadie,

y tener en mente que 

no hay nada imposible.

creo en la esperanza.

Tal vez sea una soñadora,

pero sigo creyendo.

Creo en la esperanza.

Creo en que el camino puede levantarnos del suelo.

Al fin y al cabo, 

la esperanza es lo último que se pierde.

Saber llegar

Lo importante no es llegar el primero,

sino saber llegar hasta el final.

su sonrisa.

La curva más bonita de una mujer, 

es su sonrisa.

las cosas buenas solo suceden una vez.

Y es ahí donde te das cuenta 

que las cosas solo suceden

una vez en la vida.

no quiero

El cielo no es el límite.

No digas que el cielo es el límite,

cuando existen huellas en la luna.

Prepárate para las cosas buenas.

No podía haberme equivocado más.

Creí que sonreír me ayudaría a salir de paso,

fingir que todo iba bien.

Tenía un plan, quería dejar de ser lo que era.

Iniciar una vida como una persona nueva;

una persona sin pasado, sin dolor.

Pero no es ta fácil, las cosas

malas quedan contigo,

te persiguen. No puedes escapar de ellos por mucho

que lo desees.

Lo único que puedes hacer es prepararte paras las cosas buenas;

para qué cuando lleguen las invites a entrar,

porque lo necesitas.

los caminos se bifurcan.

Siempre hay un momento en que los caminos se bifurcan,

cada uno toma una dirección

pensando que al final los caminos los volverán a unir.

Desde tu camino ves a esa persona cada vez más pequeña.

No pasa nada, estamos echos el uno para el otro,

al final estará ella.

Pero al final solo ocurre una cosa.

Llega el puto invierno.

Darse cuenta de las cosas

No quiero darme cuenta de las cosas,

hasta que aparece alguien,

alguien que te dice que aflojes,

y cuando aflojas te das cuenta de las cosas.

Qué entre las botellas de Tekila,

hay un trofeo de baile,

que está sonando mi canción favorita

o que hoy es martes y trece.

Cosas pequeñas.

Ella me enseña a ir despacio,

y eso me sienta bien.